Tierras Rojas

Título: Tierras Rojas

Título original: Red Country

Autor: Joe Abercrombie

Género: Fantasía

Año de publicación original: 2012

 Fecha de esta edición: 2013

Editorial: Alianza Editorial

ISBN: 978-84-206-7805-4
Precedido por: Los Héroes
Saga: La Primera Ley

624 páginas

Sinopsis de la contracubierta

Shy Sur creía haber enterrado su sangriento pasado, pero tendrá que recuperar algunos de sus viejos hábitos para rescatar a sus hermanos. Comienza la persecución con un par de bueyes y su cobarde padre adoptivo Lamb por toda compañía. Pero Lamb también tiene sus propias cuentas por ajustar…
El viaje por las áridas llanuras, marcado por viejas hostilidades, duelos y matanzas, los conducirá a un enfrentamiento con los Fantasmas. Peor aún, les obligará a aliarse con Nicomo Cosca, infame soldado de fortuna, y su abogado Temple, dos hombres de los que nadie debería fiarse.

 "—¿Cómo puedes seguir tan tranquilo? —le preguntó en voz baja—. Es... es como si lo estuvieras esperando.
—Siempre lo he estado esperando. "

Viví con intensidad mis lecturas de La Primera Ley, como podréis observar en el blog. Cuando leí Tierras Rojas, me apenó un poco haber llegado al final de las novelas independientes situadas en ese mundo. Imaginad mi alegría cuando me enteré de que una antología de relatos y una nueva trilogía situada en este mundo comenzarían a ser publicadas a partir de 2016...

Antes de nada, quiero haceros una advertencia: esto no es Los Héroes. Hay enfrentamientos, pero no batallas de ese calibre. Tierras Rojas presenta una historia más íntima situada en una zona del Círculo del Mundo que no exploramos mucho en los otros libros, aunque algunos nombres que aparecen en el mapa con el que se introduce esta historia sí que le resultará familiares al lector. 

Aquí, Abercrombie homenajea las historias de vaqueros con una aventura ambientada en un western medieval, adaptada a las características de su mundo, con una trama emocionante y un pasado que acosa a los personajes.

Como siempre, recomiendo haber leído todas las novelas anteriores, porque así disfrutaréis de una experiencia más completa. Saborearéis mejor esta historia si conocéis los sucesos anteriores y los personajes que han intervenido, ya que... ¡hay unas cuantas referencias que no tienen desperdicio!

Esta historia empieza durante un día de regateo en la vida de Shy Sur. Tras volver junto a su padre adoptivo Lamb a la granja donde viven, descubre que la han reducido a cenizas y que sus hermanos han sido secuestrados. De esta manera, parten en su busca en un viaje donde se rodearán de las más diversas compañías.

Por otro lado, Temple, que siempre elige el camino fácil, trabaja para la Compañía de la Graciosa Mano, liderada por un infame mercenario. La Unión les ha contratado para dar caza a grupos rebeldes dirigidos por alguien llamado Conthus, pero las incursiones que realizan incomodan al letrado, que no se siente a gusto siendo cómplice de tanta violencia.

Por supuesto, la cosa está muy lejos de quedar ahí. ¿De qué manera se cruzarán sus caminos?

El narrador, en pasado y tercera persona, vuelve a enfocar la historia de una manera u otra según el personaje en el que se centre. En esta ocasión, nos ofrece un viaje a través de unas tierras sin ley, como si una película del oeste se tratara, pero adaptado a su estilo medieval: no veréis duelos a base de revólveres, pero sí de espadas y golpes. Abercrombie mantiene el realismo que le caracteriza, y algunas escenas se nota que rinden tributo al western por el modo en que son descritas, dándoles un toque encantador.

Una vez más, los personajes son uno de los puntos fuertes de la novela. Shy Sur es una joven con un pasado turbulento y experta regateadora que considera a su padre adoptivo «una especie de cobarde» debido a la manera tranquila en que suele actuar y cómo enfoca el rescate de los niños secuestrados. En cuanto a Lamb, prometió a la madre de estos que cuidaría de sus hijos, y piensa cumplirlo. Pese a lo imponente de su figura, siempre evita los conflictos. Pasé grandes momentos con él, me resultó especialmente emocionante cómo poco a poco se daban detalles sobre su persona y se le veía en acción. 

Temple es otro de los pilares de esta historia. Durante su vida, se ha visto obligado a desempeñar trabajos de lo más diversos y, seguidor como es del camino fácil, sus decisiones no han sido de lo más acertadas. Su evolución es otro de los puntos que me gustaría señalar de este libro.

Los secundarios que presenta este libro también son de lujo. Como no basta con hacer referencias y cameos de personajes que ya vimos en otras aventuras, da un buen papel a los nuevos... y algunos viejos, ya hubieran aparecido brevemente o tuvieran gran peso anteriormente. Quiero destacar al líder de la Compañía de la Graciosa Mano, a quien vemos en sus horas más bajas y su momento más decadente. ¡Con lo que me había llegado a gustar, y lo que me alegró verlo de nuevo! No faltan peculiaridades, comportamientos de lo más variado según en quién nos centremos, múltiples conflictos...

Tierras Rojas también tiene momentos en el que el punto de vista se sitúa desde una multitud de personajes eventuales para añadir dramatismo a la situación, lo cual me resultó bastante impresionante.

En cuanto a la trama, Abercrombie presenta una historia más íntima, sin grandes escenarios épicos, sino unas tierras inhóspitas situadas en la frontera alejadas de lugares como la Unión o el Viejo Imperio en las que la gente busca prosperar, pues los rumores sobre el oro rara vez son desatendidos, y los nativos sufren la invasión de su territorio.

Esta historia me resultó especialmente entrañable: la búsqueda de los niños secuestrados, su destino y cómo les afecta, las relaciones entre algunos personajes y, en definitiva el tratamiento que hace Abercrombie de todo esto me pareció muy tierno... y triste, cuando tocaba. Sin abandonar la violencia, el oscuro humor y el realismo al que nos tiene acostumbrados, y nos encanta, este autor.

Como manifiesta algún que otro personaje, el tiempo de la magia va quedando atrás, y de hecho empiezan a observarse ciertos indicios de industrialización.

No puedo dejar de hablar de esta historia de búsquedas, venganza, tristeza por las decisiones tomadas en el pasado y redención sin mencionar su final. Las sorpresas y giros de Abercrombie no se agotan ni hasta en la conclusión, donde ocurre... algo. No es lo que esperaba, como de costumbre, y me resultó un tanto sorprendente... pero, tras pensarlo un poco, me di cuenta de que encajaba a la perfección en el espíritu de estas novelas. Es el final ideal que podía tener Tierras Rojas y, en definitiva, esta etapa de La Primera Ley.

Amena, entretenida, dinámica, entrañable y emotiva... Los personajes de este autor siempre están bien definidos, y se nos muestra una historia más personal, sin dejar de lado la narración con pinceladas de particular humor, con el crecimiento de unos y la degeneración de otros. No pude evitar sentir un melancólico vacío al finalizar este libro, ya que había disfrutado con ganas de las lecturas de esta saga, y... había llegado al final. El esperado y temido momento se había producido, y muchos personajes lo habían notado durante el transcurso de las páginas que conforman la saga.

Como habréis imaginado, saber que habría más historias situadas en este mundo fue toda una alegría. Ahora puedo deciros Tierras Rojas es un punto en la narración del gran relato de La Primera Ley, y un regalo para todas aquellas personas que habíamos disfrutado con las novelas de la saga. Una experiencia grata, muy grata.

¡Saludos!