En caída libre

Título: En caída libre

Título original: Falling Free

Autora: Lois McMaster Bujold

Género: Ciencia-ficción

Año de publicación original: 1988

 Fecha de esta edición: 1990

Editorial: Ediciones B

ISBN: 84-406-1204-4

Sucedido por: Fragmentos de honor
Saga: Miles Vorkosigan

367 páginas

Sinopsis de la contracubierta

Leo Graf era tan solo un competente ingeniero de soldadura: se ocupaba de sus asuntos, hacía bien el trabajo y se ajustaba a las especificaciones. Pero todo cambió cuando fue asignado al Habitat Cay y conoció a los cuadrúmanos, seres sin piernas y con cuatro brazos adaptados por la ingeniería genética para el trabajo en ausencia de la gravedad. ¿Quién podría permanecer indiferente ante la explotación y la esclavitud de un millar de jóvenes tratados como objetos por Galac-Tech, la gran corporación espacial?

 "Leo pestañeó y tuvo que contener la respiración para esconder su sorpresa. El muchacho no tenía piernas. De los pantalones cortos salía un segundo par de brazos"

El orden de las reseñas de las novelas de Miles Vorkosigan no se corresponde con su cronología interna, como ya advertí. Sin embargo, las estoy publicando por el orden de lectura que seguí, ya que me pareció adecuado para aficionarme a las aventuras del personaje y, cuando estuviera suficientemente preparado, ampliar su universo. Tal y como acaba Hermanos de armas, y por lo que me habían comentado sobre Danza de espejos, decidí que fuera entre esas dos novelas cuando, en un pequeño paréntesis, diera un salto al pasado. Personalmente, acerté por completo.

Puestos a viajar al pasado, En caída libre tiene lugar unos doscientos años antes del nacimiento de Miles Vorkosigan. Después de este libro, recomiendo seguir con Fragmentos de honor y Barrayar, los directamente posteriores (en la cronología interna), que considero necesario leer antes de poner mano sobre el mencionado Danza de espejos, pues lo disfrutaréis más gracias a que tendréis un mejor conocimiento de cierto personaje. De todas maneras, no nos precipitemos. Estamos aquí para hablar de En caída libre, y eso voy a hacer.

Leo Graf, ingeniero, llega a la órbita del planeta Rodeo para instruir a los miembros del Proyecto Cay. Los gastos que generan una estación espacial le parecen bastante elevados, pero el director del proyecto le asegura que muchos de esos gastos no se contemplan, porque no son necesarios. El asombro de Graf es inmenso al descubrir que la joven mano de obra utilizada es un experimiento llevado a cabo mediante biotecnología, por lo que sus derechos no están muy claros... o demasiado, para la corporación que financia el proyecto; un proyecto cuya viabilidad cada vez está menos clara.
Graf no está de acuerdo con los planes que tienen para las personas a quienes va a enseñar su labor, pero solo es un humilde trabajador. ¿Qué puede hacer alguien como él en un caso tan injusto como este?

La narración, en pasado y tercera persona, nos hace ver la mayor parte de la aventura desde el punto de vista de Leo Graf. Al principio, solo es un espectador, pero poco a poco evoluciona conforme va llevando la iniciativa. Aparte de este, aparecen otros personajes como la doctora Yei, una profesional encargada de que los seres que habitan el Hábitat Cay se eduquen como el proyecto lo requiere, o el director Bruce van Atta, que representa a esos incompetentes que por alguna razón acaban en puestos de gran responsabilidad.
Las verdaderas estrellas de esta historia son los cuadrúmanos, a quienes ya hemos tenido ocasión de ver en alguna que otra historia de Miles Vorkosigan, aunque no en tanta cantidad. A través de ellos, el lector puede reflexionar un poco acerca de las manipulaciones genéticas, los derechos de estos seres y las condiciones en las que viven y son educados.

Como de costumbre, el estilo de Bujold hace disfrutar a los lectores de una grata lectura, ligera y entretenida. No es el colmo de la profundidad, ni tampoco busca serlo: se trata de una aventura en la que se pone en marcha una osada operación que os hará pasar un buen rato.

En conclusión, una historia ubicada en el Vorkosiverso, por lo que comparte ideas ubicadas en él, pero cuyo argumento no está conectado directamente con otras historias. Esto no supone un problema, ya que es un libro ameno con una aventura entretenida y personajes tiernos, emplazados en una difícil situación de la que tienen que aprender a ser conscientes. Tampoco faltan momentos de acción...

¡Saludos!