Título: Baila, baila, baila
Título original: ダンス · ダンス · ダンス
(Dansu, dansu, dansu)
Autor: Haruki Murakami
Año de publicación original: 1988
Fecha de esta edición: 2012
Editorial: Tusquets Editores
Fecha de esta edición: 2012
Editorial: Tusquets Editores
ISBN: 978-84-8383-425-1
453 páginas
Sinopsis de la contraportada
"Baila. No dejes de bailar mientras suena la música. ¿Lo entiendes? Baila. No dejes de bailar. No pienses por qué lo haces. No le des vueltas ni le busques significados. En realidad no significa nada. Si te pones a pensar, las piernas se detienen"
Sinopsis de la contraportada
En marzo de 1983, el joven protagonista de esta novela, redactor freelance todoterreno, después de pasar días sombríos, siente la necesidad de volver a ciertos escenarios de su vida para ajustar cuentas con el pasado. Viaja a Sapporo con la intención de alojarse en el Hotel Delfín, donde años atrás pasó una semana con una misteriosa mujer que, de manera inesperada, desapareció de su lado. A su llegada descubre que han derribado el hotel y que en su lugar se alza otro, moderno y lujoso, pero su estancia allí propicia la aparición de personajes envueltos en un aura de irrealidad: una guapa recepcionista que ha vivido experiencias inverosímiles, una adolescente dotada de una aguda sensibilidad, o un antiguo compañero de colegio, ahora actor de éxito, que lo meterá en graves aprietos. Asesinatos, viajes a Hawai, pasajes a otros mundos y fiestas se suceden al ritmo de la música que suena en la radio de su destartalado Subaru. Lo cierto es que, como afirma un enigmático personaje, todo está conectado. Porque sólo se regresa al Hotel Delfín para poder empezar de nuevo.
"Baila. No dejes de bailar mientras suena la música. ¿Lo entiendes? Baila. No dejes de bailar. No pienses por qué lo haces. No le des vueltas ni le busques significados. En realidad no significa nada. Si te pones a pensar, las piernas se detienen"
Antes que nada, tengo que agradecer a PriceMinister el envío de este libro, pues, si no hubiera sido por ellos, no haría conocido esta peculiar novela que me ha causado una genial impresión.
La verdad es que tenía ganas de catar a este autor: hay un par de libros suyos por casa, pero nunca me había animado a leerlos... así que, gracias a El Barbus, pude elegir este relato para sumergirme por primera vez entre las páginas de este autor japonés de reconocimiento mundial...
Además, he entendido por qué dicen que a Haruki Murakami, o lo quieres, o lo odias: yo tampoco creo que haya un término medio, pues su estilo es realmente peculiar y, de buenas a primeras, o te gusta... o no. Admito que estaba un poco asustado cuando lo empecé, y las primeras páginas me dejaron un poco extrañado... sin embargo, tras avanzar apenas un capítulo, me sentí muy cómodo con la forma de narrar de Murakami... y su protagonista.
¿Cómo describir el argumento de esta novela? Es complicado explicarlo, no hay un objetivo fácil de discernir. El protagonista, un redactor freelance con una vida que, como se deja entrever en la historia, no le hace sentirse realizado, decide volver a un hotel en el que pasó un tiempo con una mujer que acabó desapareciendo de su vida. Sin embargo, tal hotel no existe, han levantado uno nuevo en su lugar con el mismo nombre; no obstante, decide quedarse unos días en él... a partir de ahí, se encontrará con personajes extraordinarios y se verá envuelto en situaciones que rozan lo irreal, las cuales... bueno, a algún lugar tendrán que conducirle...
Por lo que he dicho, podría pareceros un argumento soso y aburrido: ¡nada de eso! Baila, baila, baila consigue convertir de un momento a otro situaciones y lugares anodinos en extraordinarios... o los deja como tal, pero sin perder el gancho que hace avanzar al lector de página en página, englobando todas las subtramas que se van formando en una mayor, que sería el tema central de la novela: ¿un viaje o reflexión existencial? ¿Tratar de dar una misión, un sentido, una dirección a la vida? ¿Conexiones, relaciones con los demás? ¿La importancia de todo ello, tal vez?
Esta buena impresión que me ha dejado se consigue gracias al protagonista de nombre desconocido que narra la novela en pasado y primera persona, junto a los aspectos que lo caracterizan: si el libro está lleno de personajes peculiares, el más curioso de todos es el principal. Se trata del redactor freelance mencionado en la sinopsis, un hombre solitario con una vida un tanto insustancial, una personalidad singular, relaciones amorosas poco estables y un sentido del humor muy personal, lo que provoca la existencia de, por ejemplo, algunas metáforas bastante inusuales pero que encajan muy bien en esta historia; comparaciones, expresiones y "obsesiones"... especiales, o conversaciones diferentes a las de otras lecturas (otros personajes también contribuyen a ello). Pese a que lleva medianamente bien su situación, no le dejé de notar un aura... "triste" alrededor suyo, tal vez sea esa la palabra.
Al ser un tipo tan particular, consigue que el ritmo de la novela sea bastante cambiante: en algunos momentos la trama puede avanzar velozmente con rápidas sucesiones de hechos, pero en otros pueden pasar páginas con divagaciones, algunas hojas sin que ocurra nada realmente relevante o dar sensación de repetición (parte del encanto de Baila, baila, baila radica en esto) .
El resto de personajes que intervienen en esta obra también tienen su peso, tanto por el papel que juegan como por la caracterización que se les ha dado: una joven recepcionista de hotel que ha vivido experiencias terroríficas (no exactamente, pero en el momento en el que describían una de estas experiencias era de noche, estaba solo en el comedor y... ¡buf! Hacía tiempo que no se me metía tanto miedo en el cuerpo leyendo un libro), una niña huraña con una aguda sensibilidad y una familia no menos atípica (a su manera) y Gotanda, un actor y antiguo compañero de clase del protagonista que hace todo con un especial encanto (y consiguió fijarme en la cabeza el concepto de "gastos de representación", que no faltan en este libro). Debido a este último, la trama de la novela pasará a ser de "un poco fantástica" a "un poco policíaca", al menos durante un buen tiempo, ya que este hombre servirá de ayuda para encontrar a la mujer que el protagonista busca, y a partir de ahí se desarrollará otra subtrama un poco más oscura... Por supuesto, también hay otros pintorescos con interevenciones importantes, más secundarios pero a lo que no les falta cierta trascendencia.
La verdad es que disfruté mucho leyendo la novela, y me dio pena tener que acabarla. Los personajes me caían bien, y el estilo narrativo de Murakami me pareció muy interesante, ya fuera por el argumento que elaboró como la forma de llevarlo (y su mensaje...).
Como comprobaréis en caso de leer Baila, baila, baila, situaciones que pueden resultarnos surrealistas no faltan: la libertad que le dan al protagonista para ocuparse de la niña anteriormente mencionada, la naturalidad con la que afronta sucesos insólitos, las vueltas que le da a hechos sin importancia, los enredos en los que se ve envuelto... todo ello aderezado con mucha música rock (la novela transcurre en 1988) y un final puede que desconcertante, ya que deja algunos interrogantes y misterios en el aire, pero responderlos ya es, en mi opinión, cosa nuestra.
En conclusión, mi primer encuentro con Murakami no podría haber sido mejor, y estoy deseando leer más obras suyas. Los Reyes Magos han sido generosos y me han regalado 1Q84 Libros 1 y 2, así que tengo otra historia del escritor japonés en la manga preparada para ser leída. Entiendo que Baila, baila, baila no gustará a todos, pero creo que deberíais darle, al menos, una pequeña oportunidad. Valdrá la pena.
¡Saludos! :D